martes, 15 de febrero de 2022

¿POR QUÉ LA RECTA RAZÓN ES REGLA MORAL?


El sujeto inmediato del orden y del desorden moral es la voluntad, cuya rectitud consiste en que mantenga su dirección hacia el verdadero fin último del hombre y mantenga en esa dirección las tendencias, pasiones y acciones humanas. Se añade que, si la voluntad es el sujeto de lo moral, la regla inmediata de lo moral es sin embargo la razón. Y esto no sólo en el sentido bastante obvio de que ella nos da a conocer lo bueno y lo malo, sino también en el sentido, más profundo, de que la razón es el punto de referencia
y el criterio interno de la constitución y distinción de lo bueno y de lo malo, de la virtud y del vicio: una acción es buena porque es racional o razonable, y no al revés. La interpretación, valoración y dirección o corrección de la afectividad por parte de la razón, es un buen ejemplo de lo que ahora decimos.

El motivo por el que la razón es el principio y el criterio ordenador de la conducta se comprende a partir de cuanto sabemos acerca del fin último del hombre. La visión de Dios es el bien supremo de cualquier ser inteligente, y lo es del hombre en cuanto que el hombre está dotado de inteligencia. El fin último es el bien propio y especifico de la razón. La parte racional (conocimiento y amor) es el anillo de conjunción entre el hombre y el bien último de su vida. Por lo que lo bueno para el hombre es que la razón despliegue sus operaciones sin interferencias que la distorsionen, y que lo que en el hombre no es en sí mismo racional opere <<razonablemente>> es decir, bajo la dirección de la razón y poniéndose a su servicio.

Cabe concluir que, aunque desde el punto de vista de la fundamentación ontológica de la moral, la congruencia con el fin último fundamenta el valor y la real apetibilidad por parte del hombre de lo que es bueno y razonable; sin embargo, a efectos de la ordenación de nuestra conducta, y según nuestro modo de conocer, se debe afirmar justamente lo contrario: un comportamiento es congruente con nuestro fin último porque es bueno, razonable o conforme a la recta razón. Éste último es el punto de vista de la regla moral.




jueves, 15 de julio de 2021

BEATO MIGUEL TIU IMUL, CATEQUISTA

Originario de La Montaña-Parraxtut, procreó una numerosa familia a la que invitaba a orar siempre. Catequista entregado y siempre disponible para ayudar a los demás. Decía a los de su comunidad, "no hay que tener miedo a la muerte porque cuando uno dice la verdad la gente dice que es malo". Siempre decía es la verdad. Fue encarcelado y torturado un tiempo. Más tarde le avisaron que querían matarlo y no quiso huir. Afirmaba que, "si muero, muero como Jesús. Él no fue pecador y la gente decía que era hombre malo. Yo, sí soy pecador". Conocía a quién le amenazó de muerte, pero nunca mencionó su nombre. "Dios sabe mejor, que quede así". Al salir de su casa, le dispararon por la espalda. Tenía 50 años. 



BEATO NICOLÁS CASTRO, CATEQUISTA Y MINISTRO EXTRAORDINARIO DE LA COMUNIÓN

Casado y padre de familia. En Chicamán desarrolló su labor como cooperativista, promotor de la salud, catequista y ministro extraordinario de la comunión. Hombre de oración y convencido que sin la comunión eucarística es difícil mantenerse en la fe. Iba al departamento vecino y de ahí llevaba las hostias consagradas en su morral, entre las tortillas de maíz, para que su comunidad pudiera recibir al Señor en el sacramento eucarístico. Ante amenazas recibidas no huyó y continuó sirviendo a su comunidad. Sacado de la casa violentamente le golpearon y dispararon. Rodeado de su familia empezó a orar el Padre nuestro y solo llego a la mitad. Murió orando como había vivido. Tenía 35 años.



BEATO TOMÁS RAMÍREZ CABA, SACRISTÁN Y CATEQUISTA

Sacristán mayor de Chajul por más de 20 años. Casado y padre de familia, catequista. Hombre responsable y fiel. Recibió la misión de cuidar del templo del convento, de favorecer la oración y formación de la comunidad. Se enfrentó a las autoridades militares por cumplir con su deber, éstos le asesinaron disparándole por la espalda. "Mi compromiso es dar la vida aquí en la iglesia... Si me matan aquí estaría contento", decía él. Tenía 46 años.



BEATO DOMINGO DEL BARRIO BATZ, SACRISTÁN Y CATEQUISTA

Sacristán, catequista, traductor, enfermero empírico, acompañante del Padre en sus correrías apostólicas. Casado y padre de tres hijos. Hombre humilde y cercano. Fue el amigo del P. José María y no quiso dejarlo solo en el regreso a Chajul: "Si te matan, me matan a mí también. Solo predicamos la Palabra de Dios". Cayó acribillado en la misma emboscada en que mataron al Padre José María. Tenía 29 años. 



BEATO REYES US HERNÁNDEZ, CATEQUISTA

Conocido en Macalajau como Germán por su abuelo. Casado y con familia numerosa. Catequista, cantor, miembro del comité pro-mejoramiento, promotor de salud. Hombre disponible y colaborador. Supo unir fe y compromiso social. Decía él. "Estoy amenazado por el ejército y es posible que me vayan a matar, pero no tengo miedo... Estoy bien comprometido con la Iglesia y no veo que eso sea un delito". Sacado de su casa le dispararon por la espalda y en la cabeza. Tenía 41 años. 

BEATO ROSALÍO BENITO, CATEQUISTA

Fue uno de los primeros integrantes de la Acción Católica en el Quiché. Originario de Chinique de las Flores, casado y padre de familia. Analfabeto, trabajador y responsable; rezador de memoria con oraciones para todas las circunstancias de la vida. Catequista incansable, ansioso siempre de aprender más sobre la Palabra de Dios. Tenía 80 años cuando fue torturado y masacrado, y su cuerpo echado a una charca para ser devorado por los animales.


 

¿POR QUÉ LA RECTA RAZÓN ES REGLA MORAL?

El sujeto inmediato del orden y del desorden moral es la voluntad, cuya rectitud consiste en que mantenga su dirección hacia el verdadero fi...